Análisis de «A Plague Tale: Innocence», una obra sorprendente
Pocas veces nos pasa que vemos el teaser o trailer de un juego y pensamos «Oye, se ve bien» pero no lo suficiente como para darle una oportunidad.
Nos gustaría remarcar desde la Redacción de Bigotes que solo exponemos análisis de videojuegos que han sido jugados y testeados al 100%, tras conseguir su consiguiente trofeo de platino, todos sus logros, desafíos extra y/o conseguidos todos sus desbloqueables.
En este caso, es todo lo contrario. A Plague Tale: Innocence se presentaba de manera tímida en el E3 de 2017 mostrándonos a dos personajes en la Francia del siglo XIV escapando de las ratas con la ayuda de la luz y el fuego. Muy pocos hablaron por entonces sin saber que se estaba puliendo una joya de Asobo Studio haciendo que las críticas enloquecieran.
El juego nos cuenta la historia de Amicia y Hugo, dos hermanos en la Francia de 1348, que verán como sus vidas se verán truncadas a manos de la Inquisición queriendo hacerse con el pequeño. Sin apenas conocerse el uno al otro, ya que él acarrea una enfermedad haciendo que sea casi imposible que se vean, tendrán que escapar y colaborar juntos si quieren sobrevivir no sólo a sus peligrosos perseguidores, sino también a todo lo que se tornaba por entonces en la época como era la Guerra de los Cien Años con los ingleses invadiendo tierras francesas, como también a la peste negra y un número de ratas tan abrumador que harían temblar al mismísimo flautista de Hamelín.
La belleza del juego no se puede explicar, es mejor que entre por los ojos del jugador para comprender que un pequeño estudio puede hacerte soltar el mando y dejarte mirando la pantalla atontado. La ambientación es, a la vez que sorprendente, cruel ya que nos muestran las cosas tal y como fueron en la época. Dos contrastes que funcionan tan bien como ver a la luz luchando contra la oscuridad.
Todo esto acompañado de una banda sonora que hará que nos incluya en la tensión cuanto rodea a nuestros protagonistas franceses. Y no serán los únicos ya que por el camino encontrarán a personajes con los que podrán contar con su estimada ayuda y a cada cual con un rol cuanto menos interesante en el juego. Se podría decir que serían los Goonies del Siglo XIV.
La narrativa te atrapa, quieres saber a cada paso que das qué será lo siguiente con lo que se atormentarán y no sería una sorpresa que para los próximos Game Awards aparezcan nominados en la categoría de Mejor Narrativa del que, de momento, tienen mi voto.
Los efectos de sonido y animaciones están bien trabajados aunque esto último se podría haber mejorado un poco más pero nos olvidamos de ello cuando andamos con las cinemáticas. Eso sí, no vendrá doblado al español pudiendo elegir solamente inglés, francés y alemán aunque, sinceramente, lo apropiado sería escucharlo en francés con textos en castellano.
Aunque si tienen un punto débil son los controles. Suelen resultar algo toscos al comienzo y nos podremos adaptar sin problemas, aunque a la hora de pelear (Amicia contará con una honda) puede que nos desesperemos un poco con el apunte aunque los ataques son tanto efectivos como certeros. Incluso tendremos la posibilidad de ir mejorando el arma y el equipo a medida que vamos avanzando en la historia.
Aparte de la dura odisea por la que tendrán que pasar, el juego cuenta con unos coleccionables interesantes para incluir un reto mayor. Podrán recoger desde flores en la que el pequeño Hugo se verá que es todo un experto, pasando por regalos y llegando hasta las curiosidades como muñecos, tableros de ajedrez y yelmos en los que obtendremos información. Incluso podremos repetir los capítulos en los que nos informarán de los coleccionables que nos faltan, en caso de querer completarlo al 100%.
Todo esto y más hacen que A Plague Tale; Innocence se haya convertido en una de las mayores sorpresas del año resaltando en una historia más que interesante, una banda sonora espectacular, una jugabilidad medianamente buena y unos personajes carismáticos a los que pedirás que sobrevivan como si se tratase de un capítulo de Juego de Tronos.