Análisis The Legend of Zelda: Link´s Awakening, un remake en condiciones

De todos es sabido que la saga de The Legend of Zelda es de las más famosas de la historia de los videojuegos y siempre destaca por sus laberínticas mazmorras, ingeniosos puzzles y épicas batallas. Para fijarnos cuál fue el primer juego de la saga llevada a una portátil deberíamos viajar al pasado, muy atrás hasta la década de los 90. El primer Zelda que llevaríamos en nuestro bolsillo saldría a la venta en junio del 93, un juego que para una minoría se pasaría por alto y una mayoría lo disfrutaría y lo catalogaría como uno de los mejores de la saga. Lo más curioso es que vivimos en una época donde los remakes y remasters están a la orden del día pero nadie se esperaba que 23 años después nos fuesen a deleitar con un renovadísimo Link´s Awakening que fue sin duda la sorpresa de más de uno con edición coleccionista incluida donde jugarían con nuestro corazón de gamer. La pregunta es fácil, ¿ha superado nuestras expectativas?. La respuesta es más fácil aún: sin duda alguna, sí.

Nos gustaría remarcar desde la Redacción de Bigotes que solo exponemos análisis de videojuegos que han sido jugados y testeados al 100%, tras conseguir su consiguiente trofeo de platino, todos sus logros, desafíos extra y/o conseguidos todos sus desbloqueables. Sin más dilación, dentro análisis.

La aventura comienza con nuestro pequeño protagonista navegando en su barca atravesando una tormenta tan peligrosa donde le llega a alcanzar un rayo haciendo que su medio de transporte marítimo acabe destrozado y arrastrado por la marea hasta las orillas de una isla misteriosa. Link despertará en la casa de unos desconocidos, la dulce Marin y el rechoncho Tarin y le explican que se encuentra en la Isla Koholint. Link sin perder tiempo decide ir a la orilla donde lo encontraron para recuperar su espada y donde conocerá a un misterioso búho. Este le explica que para volver a casa deberá despertar al guardián de la isla, el Pez Viento. Sin perder ni un segundo, nuestro orejudo emprende una nueva aventura en una isla totalmente desconocida donde deberá reunir 8 instrumentos para así poder despertar al Pez Viento que se encuentra dentro de un gigantesco huevo en lo alto de una montaña.

Una vez metidos en la historia, emprenderemos un viaje en una isla donde el mapa de primeras nos dará a entender que será un viaje corto y sencillo. Ni mucho menos pues si queremos llegar a la otra punta puede que nos requieran más de un objeto o habilidad lo que nos llevará un tiempo en investigar todos los rincones de Koholint. Las mecánicas del juego son simples, sencillas y con cierta mejoría ya que hace 23 años no podíamos atacar en diagonal pero en este caso tendremos esa posibilidad facilitándonos las peleas contra los enemigos que nos vayamos encontrando y para solucionar enigmas. Tendremos un menú más rápido y accesible donde podremos llevar hasta dos objetos y a diferencia del portátil tendremos el botón superior derecho para usar el escudo sin necesidad de cambiarlo desde el menú. La jugabilidad se muestra de manera muy positiva. Si en nuestra pequeña Game Boy ya estábamos contentos aquí podemos decir que se ha rozado la perfección ya sea jugándolo en la Switch como en la tele. Eso si, lo juguemos donde lo juguemos notaremos una pequeña bajada de frames cuando estemos explorando en exteriores, todo lo contrario que en interiores, aunque apenas no nos percataremos de ello pues estaremos alucinando con los vivos colores que se nos muestran sea en el bosque, la montaña o una cueva tétrica.

Contaremos con la banda sonora típica de la saga incluyendo las que venían en su antiguo juego. La mejoría es más que notable metiéndonos de lleno pero en las mazmorras se volverán un tanto repetitivas sobre todo si nos quedamos atascados y no logramos avanzar, y es que los puzzles pueden pasar sin problemas de fáciles a desesperantes, pero no es algo que ocurra a menudo. De hecho, sus puzzles no solo se centrarán en sitios cerrados pues la isla a pesar de no parecer gran cosa, nos llevará un tiempo llegar de un extremo a otro donde necesitaremos la ayuda de los tan famosos items de la saga: el gancho nos servirá para llegar a zonas lejanas y evitar peligrosas caídas, las bombas nos mostrarán nuevas cuevas donde indagar y la pluma con la que podremos saltar dependiendo de si nos encontramos corriendo o no, aunque para correr necesitaremos unas botas especiales que hará facilitarnos el juego en más de una ocasión.

Como en la mayoría de sus juegos habrá lugares a los que accedemos sea en el mapa o en mazmorras donde pasaremos a una visión de plataformeo. Serán escasos y zonas simples de pasar aunque en algunos nos pedirán de nuestro ingenio para poder llegar a la otra salida y proseguir con la odisea. Los enemigos serán variados y las batallas contra los jefes, a pesar de tener una dificultad media baja aunque también dependerá del modo en que juguemos, serán algo exigentes pues cada uno tiene su propio estilo de pelea y en algunos deberemos recurrir al equipamiento que vayamos adquiriendo a medida que avanzamos.

Aparte de contar con su famoso coleccionable de piezas de corazón donde cada vez que cojamos cuatro contaremos con un punto más de vida, tendremos también las caracolas que ya llegamos a coleccionar hace más de dos décadas salvo que ahora el número ha aumentado y cada vez que cojamos un número determinado se nos recompensará con un jugoso premio en una casa con forma de la misma que encontraremos en la isla. Y no solo será buscar pues también podremos conseguir estos coleccionables ayudando a los tantos personajes que nos encontraremos y jugando al famoso minijuego del gancho entre otros más.

Al hablar de la duración del juego podríamos decir que rondaría las 20-25 horas, pero si nuestro objetivo es conseguir el 100% podría llevarnos unas 40-45 horas teniendo en cuenta que el número de caracolas es más alto y que podemos aumentar el número de flechas, bombas o polvos. Eso sí, existen los viajes rápidos para trasladarnos de una punta a otra del mapa para ahorrarnos tiempo de viaje, aunque nunca esta de mas viajar a pie un poco para descubrir algún secreto nuevo. Podremos empezar una partida normal donde recibiremos menos daño y los corazones para recuperar vida abundan por doquier, aunque si queremos que nuestro reto sea aún mayor tenemos la oportunidad de empezar nuestra aventura en modo héroe haciendo que el daño que nos hagan sea mucho mayor y el único modo de curarnos será cuando consigamos un corazón, una pieza del mismo o encontrando fuentes de hadas que nos aliviarán pudiendo atrapar hadas en las botellas con las que podremos recuperar varios corazones pudiendo tener un respiro. Aunque si os parece poca cosa, hay un logro de hacerte el juego sin morir ni una sola vez pudiendo ver una imagen nueva después de los créditos, aunque el premio es algo pobre teniendo en cuenta el requisito que nos proponen.

Una de las grandes novedades es el diseño de mazmorras. Conoceremos a un personaje peculiar llamado Dampé al que deberemos llevarle unas losas especiales llamadas piedras salizas para construir mazmorras donde tendremos nuestras propias metas. Eso sí, solo podremos hacerlo con las habitaciones que ya hayamos visitado haciendo que pierda su miga pues conoceremos como salir de ellas aunque se lo podríais proponer a vuestras parejas o amigos como un reto extra haciendo más variable el juego.

En conclusión, nos han ofrecido un remake que unos pocos pidieron y donde muchos se alegraron para poder probar de nuestras manos porque The Legend of Zelda: Link´s Awakening es uno de los mejores juegos de la saga con una traducción al español perfecta, una jugabilidad más asequible y con la que más de uno querrá desempolvar su antigua portátil para poder volver a jugar en la cama echado a oscuras mientras nos dan las tantas. Sin duda, el mejor aperitivo a espera de las nuevas noticias que nos traerá Nintendo con la secuela de Breath of the Wild. Pasen los años que pasen, seguiremos siendo esos críos que eramos y eso, no tiene precio.