Análisis «Resident Evil 3 Remake», los últimos días de Raccoon City
En septiembre de 1999 Capcom lanzó su tercera entrega de una de sus sagas más conocidas en el mundo de los videojuegos, Resident Evil 3 Némesis. Muchos fuimos los afortunados que nos pusimos en la piel de Jill Valentine y Carlos Oliveira para sobrevivir a la pesadilla de Raccoon City, y a la vez los desgraciados que tuvimos que sufrir los incansables ataques y acosos de Nemesis. En plena época de remasterizaciones y remakes, Capcom nos deleitó hasta hace poco con Resident Evil 2 y no iban a perder la ocasión de hacer lo mismo con Némesis sin tener ni un solo segundo de descanso. La pregunta que se hacían todos era ¨¿estará a la altura?¨, una pregunta difícil de responder pues se disfruta a la vez que disgusta ya que el lavado de cara es más que notable, pero se echan en falta varios aspectos del juego.
Nos gustaría remarcar desde la Redacción de Bigotes que solo exponemos análisis de videojuegos que han sido jugados y testeados al 100%, tras conseguir su consiguiente trofeo de platino, todos sus logros, desafíos extra y/o conseguidos todos sus desbloqueables.
Misma historia, nuevos conceptos
Nos encontramos en Raccoon City, una ciudad prácticamente gobernada por la poderosa empresa farmacéutica Umbrella y que se encuentra en sus últimos días de vida. Nuestra protagonista Jill Valentine, a la que ya controlamos en la primera entrega de la saga, empezará su pesadilla en su apartamento donde se encontrará rodeada de documentos para destapar todas las verdades de Umbrella. El problema viene cuando es atacada por un nueva y poderosa arma biológica conocida como Némesis, una especie de Tyrant mejorado con la temible capacidad de correr, atacar a distancia y el uso de armas.
Por suerte para Jill, no se encontrará sola en esta nueva pesadilla pues contará con la ayuda de los militares especializados de Umbrella, la U.B.C.S. donde conocerá a Carlos Oliveira, un militar que hará lo necesario por ayudar a todos los que le rodean y los desafortunados ciudadanos. Se profundiza mejor no solo en la historia sino en todo el arco argumental consiguiendo así que quedemos satisfechos en cuanto al canon de la saga.
Máximo detalle en todas las esquinas
Una de las tantas impresiones que nos llevaremos será la impecable calidad de sus escenarios en todo su esplendor. Los de la vieja escuela valoraremos cada calle que atravesemos haciéndonos revivir esa experiencia que disfrutamos hace años aunque notaremos una pequeña bajada de calidad a la hora de exterminar zombis, pues en Resident Evil 2 mientras contemplábamos como se desgarraban brazos y piernas de nuestros hambrientos enemigos, aquí veremos que desaparecerán en un simple estallido aunque eso no nos quitarán las ganas de vaciar el cargador de nuestra pistola.
Aparte de todo su apartado técnico disfrutaremos bastante viendo los miles de easter eggs que habrán repartidos por el juego sobre todo al comienzo en la ciudad. Guiños como muñecos en una tienda siendo una clara referencia a Mega Man, como póster de juegos de parodias acerca de Monster Hunter y Ghost and Goblins. Y esto es solo la punta del iceberg pues habrá mucho más repartidos por el juego haciendo que nos arranquen una sonrisa nostálgica.
Jugabilidad de copia y pega con nuevas novedades
A la hora de controlar a nuestros personajes ya que también controlaremos a Carlos como hicimos varios años atrás, no tendremos ningún problema pues los controles serán totalmente los mismos del remake de su antecesor. La única novedad es que dispondremos de una habilidad para esquivar los insaciables ataques de todos nuestros enemigos con pulsar un simple botón. De hecho si lo pulsamos en el momento exacto dispondremos de unos segundos a cámara lenta para apuntar y atinar mejor nuestra puntería o más bien huir dependiendo de la situación.
Otra novedad serán las pólvoras que nos encontremos pues dependiendo de cómo las combinemos obtendremos distintos tipos de munición tanto para la pistola como el lanzagranadas aunque para este último en vez de pólvora dispondremos de explosivos consiguiéndolos de tipo incendiario e incluso ácidos.
Nemesis en estado puro… y duro
No puedo dejar pasar la oportunidad de hablar de uno de los villanos más míticos de los videojuegos, Némesis. Hace años le dábamos esquinazo fácilmente al pasar por una puerta y cambiar de escenario pero esa facilidad desaparece aquí tan rápido como decimos «S.T.A.R.S.». Aquí es cuando la acción de esquivar nos salvará de más de un golpe certero de Némesis pues nos perseguirá tanto corriendo a nuestras espaldas como gigantescos saltos haciendo que se nos ponga por delante y nos bloquee el paso. Los sustos están garantizados.
Sus batallas finales no serán solo de disparar desde lejos y esquivar corriendo de un lado a otro ya que en este caso deberemos encontrar el mejor modo posible para hacerle el mayor daño posible y así ahorrarnos el malgastar munición, sobre todo cuando comienza a transformarse en un monstruo que ya no anda sino que galopa a una velocidad terrorífica obligándonos a sudar sangre. Sus transformaciones desde la primera a la última y sus batallas serán de un nivel épico haciendo que lo disfrutemos como no nos esperábamos.
Escenarios escasos pero intensos
Una de las mayores decepciones que ha traído este remake es el hachazo que han metido a varios de sus escenarios, pues ha sorprendido bastante a los fanáticos de la saga creyendo que se les metería una duración más que aceptable pero que ha acabado siendo el centro de todas las polémicas.
Lugares emblemáticos como el parque, la batalla contra el gusano gigante o la mítica torre del reloj han sido eliminadas sin ningún motivo llevando a otro problema, su escasa duración. Cierto es que dispondremos de nuevos niveles de dificultad como son el Pesadilla y el Infierno, pero eso no compensa el que deseásemos volver a lugares míticos. Y eso que el número de calles son también bastante pobres, algo que ha hecho decepcionar a varios jugadores.
Algo que echaremos en falta también sera a la hora de tomar decisiones pues cuando nos encontrábamos con Nemesis teníamos la oportunidad de elegir si queríamos pelear o huir. No es de cobarde escapar de tan gigantesco enemigo pero si deseamos combatir con él nos obsequiará con cajas de provisiones en las que encontraremos mejoras para nuestras armas. No hay mal que por bien no venga.
Repertorio de armas contra incontables enemigos
El equipo armamentístico será el básico pues comenzaremos con una pistola y un cuchillo que al contrario que en el remake del segundo juego, este no se gastará y podremos usarlo cuanto queramos. A medida que vayamos avanzando hallaremos nuevas armas como la tan famosa escopeta, pero aparte de eso también encontraremos mejoras para mayor capacidad y daño aunque para ello deberemos de observar bien en los escenarios.
Todo este equipo armamentístico tiene un objetivo y es el de acabar con todos los monstruos que salgan a nuestro paso y podemos apreciar aquí una variación bastante agradecida con algunas novedades como los cabeza pálida, zombis que deberemos de atacar sin reparo para evitar que se regeneren. Es de agradecer que vuelve uno de los viejos conocidos de la saga como son los Hunter Beta salvo que en esta ocasión deberemos destrozar una coraza que les cubre la cara para luego dar fin a su vida.
Abundante acción a cambio de puzzles
Algo que fue de sobresaliente en el Remake de Resident Evil 2 fueron sus puzzles, algo que se echaba bastante de menos en los últimos juegos de la saga a excepción de Resident Evil 7. En este caso, el sobresaliente pasa más bien a un aprobado raspado pues echaremos de menos el tener que estrujarnos la cabeza para resolver algún acertijo pues los podremos contar fácilmente con los dedos de una mano. Por otra parte esto parece que se nos compensa con una acción con la que nos pondremos de los nervios sea tanto en cinemática como a la hora de jugar.
Otro problema con sus acertijos es que cuando jugamos luego en niveles de dificultades más elevados más de uno esperaría que los puzzles cambiasen haciendo que nos encontráramos un nuevo reto pero lo que nos encontramos es la misma solución una y otra vez haciendo que nuestro cerebro se tome un descanso que tal vez no se merecía.
Una duración que nadie deseaba ni esperaba
Llegamos al momento más delicado y controvertido de este juego y es en su corta duración. El juego no supera las seis horas y hay que tener en cuenta que si decidimos hacer el trofeo de completarlo en menos de dos horas lo podremos hacer sin problemas en una hora y media. También hay que tener en cuenta que una vez finalizado el juego adquiriremos puntos para gastar en una tienda donde podremos obtener el lanzacohetes de munición infinita haciendo que el juego se pueda completar en menos de una hora.
Por lo tanto si nuestro objetivo es conseguir todos los logros o trofeos del juego lo podremos hacer en menos de una semana, lo que nos lleva a la duda de si este juego debería haber salido al mercado a un precio mucho más bajo de lo normal.
Conclusión
Estamos ante un remake que hace justicia y con el que disfrutaremos si queremos completar todos sus méritos, pero es aquí donde reside el problema y hará que nos quedemos con las ganas de más. Nos emocionaremos con sus batallas y escenarios aunque a la vez echaremos de menos varias de sus oscuras calles a la vez que desearemos algún reto para nuestro intelecto. Un juego que podía haber dado más de si aunque nos iremos contentos a la cama sabiendo que derrotamos a Némesis y viviremos un día más para contarlo.
Ayuda a mantener nuestra web y este precioso proyecto comprando con nuestros enlaces de afiliación a amazon.es e instant-gaming.com bajo estas líneas, o compra cualquier producto que quieras accediendo mediante este enlace (Amazon) o este otro (Instant Gaming). ¡Muchas gracias por tu colaboración!
El equipo de Bigotes